Sé que la poesía es liberarse de las construcciones de sí que son las obras, hacer de ellas la llama que las consume, amar, primero y sobre todo, la luz de esa llama: pero esta certeza es sólo una ruta en la que, indefinidamente, me encuentro en el punto de salida... (...) No he resuelto nada, y justamente es por eso que sigo siendo escritor, porque escribir es la leña que se acumula, y no la llama que, por instantes, entre el humo, comienza.
Yves Bonnefoy
El territorio interior
(Ed. Sexto Piso, México, 2013)