Siempre el desecho...

Las fuentes de la escritura no son ni la metáfora eficaz ni la imagen feliz, ni tampoco la arquitectura de fachada perfecta o el manejo solvente de los tópicos de la tradición literaria. Las fuentes de la escritura, (...) podrían ser el error, la disonancia, la arqueología de una posibilidad relegada por una certeza. Nunca lo útil; siempre el desecho.

Eduardo Milán

Una cierta mirada

Crónica de poesía

(UAM/ Juan Pablos Editor, México, 1989)

Materia de ficción...

Allí donde el riesgo de delirio colectivo es más alto, allí donde se ha desdeñado el cultivo de la razón y la lógica, las explicaciones de cinco pesos se venden como pan caliente porque le dan a la conciencia un placebo, un sustituto de la razón, y así es más fácil envolver cualquier fenómeno en un aura de misterio que perpetúa el atraso y la estupidez: cualquier evento se vuelve materia de ficción.

Juan Cárdenas

El diablo de las provincias

(Ed. Periférica, España, 2017)

Alterar y corromper...

Que la poesía goce de un estatuto lingüístico impreciso y abuse, en perjuicio propio, de sinécdoques, metáforas o prosopopeyas, no deja de ser un modo de alterar el pensamiento y corromperlo.

Gonzalo Hidalgo Bayal

Nemo

(Tusquets Editores, México, 2016)

Veneno velado...

La nostalgia es un veneno velado. Se empieza por percibir un sospechoso bienestar frente a un paisaje, la lluvia en los cristales o la luna llena, y se acaba delante de un revólver.

Andrés Neuman

La vida en las ventanas

(Alfaguara, México, 2016)

Aquella ciudad...

Por un momento, sentí que aquella ciudad no tenía centro ni sentido, que daba lo mismo si caminaba en una dirección o en otra...

Oswaldo Salazar

Hombres de papel

(Alfaguara, México, 2016)

Botoncito de muestra...

(fragmento)

...la palabra

bajo su vibración tal vez es invocada la minuciosa

historia de una forma

que no es otra cosa que la minuciosa

historia de una voz

que no es otra cosa que la minuciosa historia

de una fuerza...

Jorge Fernández Granados

Lo innumerable

(Era, México, 2018)

No acaban nunca...

Las novelas son como sueños o pesadillas que no se acaban nunca, sólo se transforman en otras pesadillas o sueños...

Javier Cercas

El monarca de las sombras

(Literatura Random House, México, 2017)