viernes, 17 de julio de 2009

Dejarse suceder...

No es un mensaje de ideas lo que transmito y sí una instintiva voluptuosidad de lo que está escondido en la naturaleza y que adivino. Y ésta es una fiesta de palabras. Escribo con signos que son más gesto que voz. [...] El mundo no tiene un orden visible y yo sólo tengo el orden de la respiración. Me dejo suceder.

Clarice Lispector
Agua viva
(Siruela, Madrid, 2004)