viernes, 26 de junio de 2015

El deseo de los perros...

Saber que la auténtica cima canta en un arrebato
que tú no siempre puedes tocar: saber que cada
trozo de tu carne lo desean los perros, tras
la tienda de los adioses, tras las lágrimas del solitario,
tras la displicencia del nuevo sol que casi nunca
nunca te acompaña si estás solo...

Amelia Rosselli
La libélula
(Sexto Piso, México, 2015)