martes, 3 de julio de 2012

Cuando hay suerte y se puede...

Los fracasos suelen obligar a la reflexión y la reflexión, cuando hay suerte, puede conducir a un poblado en la costa y a un montón de páginas en blanco. Los fracasos toman café en la mañana y observan con perspicacia la luz de la tarde y, cuando pueden,  se acuestan temprano.

Cristina Rivera Garza
El mal de la taiga
(Tusquets Editores, México, 2012)