martes, 20 de abril de 2010

Un átomo de los que resultan...

Un artista que triunfa es un artista incompleto. La misión del artista es vivir una vida completa: el éxito, como un mero episodio (que es cuanto puede ser); y el fracaso, como el desenlace real, final. La muerte, analizada en los átomos que de ella resultan, ¿qué es sino la reivindicación de un fracaso, el rechazo eterno a los poderes, los deseos, los apetitos que han supuesto un estorbo a lo largo de la vida? El más noble verso del poeta, la más grande escena del dramaturgo, versan siempre sobre la muerte; porque la suprema función del artista es reflejar la belleza del fracaso.

Oscar Wilde
*En la reconstrucción escrita de una conversación, por la pluma del escritor Laurence Housman. Citado en el libro Oscar Wilde en París (Tusquets, México, 2010), de Herbert Lottman.