lunes, 17 de mayo de 2010

Conciencia y renuncia...

Odio escribir acerca de mi escritura porque no tengo nada que decir sobre ese tema. No tengo nada que decir porque no me acuerdo de lo que pasa mientras lo hago. Esos momentos son como pequeñas piezas fragmentadas de mi cerebro. No son momentos que haya vivido. Me acuerdo de los detalles de las habitaciones y de los sitios en los que he estado escribiendo, de las circunstancias, de otras cosas que hice antes y después, pero no del proceso en sí mismo. Escribir sobre escribir requiere ser consciente de ello; escribir requiere renunciar a esa conciencia.

Margaret Atwood
La maldición de Eva
(Lumen, Barcelona, 2006)